domingo, 31 de mayo de 2015

New study shows stem cell treatments promote faster healing in primates with spinal cord injury

Fuente: http://www.news-medical.net/news/20150530/New-study-shows-stem-cell-treatments-promote-faster-healing-in-primates-with-spinal-cord-injury.aspx


A new study appearing in STEM CELLS Translational Medicine, designed to test how stem cell injections affect primates with spinal cord injury (SCI), showed the treatments significantly improved the animals’ motor function recovery and promoted faster healing, too. The researchers call their findings a step forward toward the goal of improving outcomes for humans with chronic SCI.


Previous research conducted by various groups had indicated stem cell treatments helped rats with SCI. “But because there are distinct differences in the nervous system and immunological responses between rodents and primates, it is critical to determine how effective and safe the injections might be in a non-human primate SCI model as part of the translational research required for clinical trials,” explained Hideyuki Okano, M.D., Ph.D., of Keio University School of Medicine’s physiology department and a co-author of the new study.


In this study, the researchers grafted neural stem/progenitor cells (NS/PCs) derived from marmoset (a type of monkey) embryonic stem cells into adult marmosets suffering from a moderately bruised spinal cord. “The advantage of using common marmosets is the similarity between their nervous system and immunological responses and those of humans,” Dr. Okano said.


The injections were given 14 days after the SCI occurred, which research shows is an optimal time window for SCI therapy as inflammation has generally subsided by then and scar tissue has not yet had time to form. (Doctors believe that an incomplete spinal cord injury, such as those of the study animals, offers better chance for recovery than a complete SCI injury.) The results were promising.




“Eventually, motor function recovery significantly improved in the transplantation group compared to a control group that did not receive stem cells,” reported co-author Masaya Nakamura, M.D., Ph.D., of Keio’s Department of Orthopedic Surgery. “An animal in the control group, for example, could not raise her hands up to head height at 12 weeks after injury when motor function almost plateaus. On the other hand, at the same point in time a transplanted animal was able to jump successfully and run so fast it was difficult for us to catch her. She could also grip a pen at 3 cm. above head-height.”


In addition, he added, there were no signs of immune rejection or tumors, which have been a side effect of some stem cell therapies.


The researchers say this study is a step forward in their goal to improve patients with complete SCI at the chronic phase. “But we believe it will require a combination of stem cell transplantation, rehabilitation and pharmacological therapy, with the stem cells a key part of the treatment,” Dr. Okano added.


“This translational research using a nonhuman primate model is a critical step in eventually applying these cells to injured spinal cord in human patients,” said Anthony Atala, M.D., Editor-in-Chief of STEM CELLS Translational Medicine and director of the Wake Forest Institute for Regenerative Medicine.


sábado, 30 de mayo de 2015

La decelularización de corazones fallecidos permite crear 'parches' de células madre para tratar pacientes infartados

Fuente: http://noticias.lainformacion.com/salud/enfermedades-cardiacas/la-decelularizacion-de-corazones-fallecidos-permite-crear-parches-de-celulas-madre-para-tratar-pacientes-infartados_erAtUvQGd2y9rvakT3Xl85/


Investigadores del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid han logrado decelularizar hasta 39 corazones humanos obtenidos de donantes fallecidos para cultivar dichas células y crear una especie de 'parches' de células madre que podrían servir para reparar corazones infartados.








El proceso consiste en eliminar todo el contendido celular del órgano cadáver para obtener matrices tridimensionales con la arquitectura intacta, pero sin células, capaces de comportarse físicamente como el tejido normal.


Además, según han visto los autores de este hallazgo, que describe la revista 'Biomaterials', estas estructuras permiten el cultivo de células y propicia su especialización para formar tejido cardiaco, ya que mantienen sus propiedades electrofisiológicas produciendo contracción cardiaca.


El Servicio de Cardiología del hospital madrileño, dirigido por el profesor Francisco Fernández-Avilés, es pionero en el uso de terapias celulares de regeneración cardiaca a nivel mundial, tanto procedentes de médula ósea, como de grasa e incluso del propio tejido cardiaco, en infarto de miocardio, fallo cardiaco crónico y otras patologías como la miocardiopatía dilatada.


Actualmente, el trasplante de órganos es la única solución a la enfermedad irreversible terminal de cualquier órgano, pero en los últimos años la escasez de donantes hace que no todos los pacientes puedan beneficiarse de un trasplante.


Fruto de la colaboración con la doctora Doris Taylor, líder mundial en terapia celular cardiaca pre-clínica en modelos animales, se inició en el 2010 un proyecto innovador dirigido a la utilización de células madre adultas para la creación de tejido cardiaco bioartificial, utilizando corazones humanos donados, no aprovechables para trasplante, proporcionados por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT).


Desde entonces, se ha logrado decelularizar la mayor serie del mundo de corazones humanos, un total de 39 de 52 órganos donados, utilizando los otros 13 corazones como control.




Además, los investigadores han visto que esta matriz es compatible con diferentes tipos celulares, es decir, las células cultivadas sobre ella sobreviven y, no solo eso, se ha comprobado que induce y guía la proliferación, distribución y especialización de estas células para formar tejido cardiaco, e incluso, cuando se utilizan células de linaje cardiaco, cardiomiocitos, estos mantienen sus propiedades electrofisiológicas produciendo contracción cardiaca.


El equipo ha conseguido re-celularizar pequeños "parches" de matriz cardiaca humana decelularizada con diferentes tipos de células madre con los que se pretende reparar corazones dañados.


Esta continuidad del estudio publicado se realizará en altas condiciones de calidad, cultivando las células sobre estas matrices en condiciones fisiológicas adecuadas mediante biorreactores: cámaras estancas que además de mantener la esterilidad, aportan la temperatura y el oxígeno necesario para replicar las condiciones que el tejido tendría en su nicho natural.


Las primeras pruebas de la utilización de estos parches se realizarán en corazones infartados de animales grandes, lo que permitirá un sencillo salto a la clínica.


Este proyecto del Servicio de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón ha sido financiado por la Comunidad de Madrid y por fondos para Cooperación Internacional del antiguo Ministerio Español de Ciencia e Innovación y el Instituto de Investigación Carlos III.


viernes, 29 de mayo de 2015

Un estudio confirma los beneficios de retrasar el pinzamiento del cordón umbilical

Fuente: http://www.abc.es/salud/noticias/20150526/abci-cordon-umbilical-corte-jama-201505261307.html


Hacerlo dos o más minutos después del parto ayuda a prevenir la deficiencia de hierro y parece mejorar el neurodesarrollo.


Los expertos no se ponen de acuerdo sobre cúal es el mejor momento para corta el cordon umbilical.






Cada vez hay más estudios que señalan que retrasar el momento de cortar el cordón umbilical aporta más beneficios al bebé. A finales de 2014, un estudio de la Universidad de Granada y el hospital Clínico San Cecilio de Granada publicado en «Pediatrics» afirmaba que retrasar el corte del cordón umbilical de los recién nacidos durante dos minutos causaba un mejor desarrollo del bebé durante los primeros días de su vida. Ahora, un informe que aparece en «JAMA Pediatrics» afirma que ayuda a prevenir la deficiencia de hierro durante la infancia, además de mejorar las habilidades de motricidad fina y sociales de los niños a los 4 años, aunque no se asocia con ningún efecto sobre el cociente intelectual o la conducta en general.


La deficiencia de hierro es un problema de salud mundial entre los niños en edad preescolar que se relaciona con alteraciones del neurodesarrollo que pueden afectar a sus capacidades cognitivas, motoras y conductuales. Los expertos creen que retrasar el pinzamiento (clampaje) del cordón umbilical durante dos o tres minutos después del parto permite que la sangre fetal que queda en circulación en la placenta pueda ser transfundida al recién nacido. Y este proceso, aseguran los investigadores de la Universidad de Uppsala (Suecia), se ha asociado con un mejor nivel de hierro a los 4 a 6 meses de edad. Sin embargo, debido a que no hay mucha información sobre los efectos a largo plazo y sobre su seguridad, no hay recomendaciones claras sobre cuál es el momento idóneo para hacer el pinzamiento del cordón en recién nacidos a término.


Ola Andersson y su equipo han realizado un seguimiento de un ensayo clínico aleatorizado para evaluar los efectos a largo plazo en el desarrollo neurológico en los niños a los 4 años. Así evaluaron 263 niños mediante tests de inteligencia, de desarrollo y del comportamiento. Y vieron que en 141 niños se llevó a cabo un pinzamiento tardío del cordón (mayor o igual a tres minutos después del parto) y en 122 niños fue menor o igual a 10 segundos.



Los resultados no mostraron diferencias en cuanto al CI entre los dos grupos, pero sí en relación al neurodesarrollo. Los niños a los que se cortó más tarde el cordón tenían puntuaciones más altas en las pruebas de habilidades de motricidad fina, personal y social, aunque solo en los niños, no en las niñas.


En un editorial que acompaña al estudio, Heike Rabe, del hospital Universitario de Brighton (Inglaterra) cree que estos datos, a más largo plazo, hacen desaparecer las dudas sobre la seguridad de retrasar el pinzamiento. «El estudio cierra el debate sobre la seguridad a largo plazo de retraso en el corte del cordón umbilical en los recién nacidos a término».



En este sentido, Miguel Sáenz de Pipaón, de la Sociedad Española de Neonatología, señala que esta sociedad de hecho recomienda que se haga el clamplaje tardío de cordón umbilical, de 2 o 3 minutos, «siempre que sea posible», ya que cada vez hay más evidencias de que es «beneficioso para la salud del niño». En su opinión, a medida que hay más evidencia de los efectos positivos para el niño, «habrá que integrarlo en el protocolo del acto del nacimiento de forma rutinaria».


En opinión del experto de la Asociación Española de Pediatría, cada vez estamos viendo que cosas sencillas, como el hecho de retrasar 1 o 2 minutos el pinzamiento del cordón, puede tener consecuencias sobre la salud de los niños. Y, añade, lo mismo ocurre con la «cesárea, que no es igual de beneficiosa que el parto natural, o con el hecho de dar o no el pecho». Decisiones aparentemente sencillas, concluye, que tendrán un «efecto a largo plazo sobre la salud del niño.»


sábado, 23 de mayo de 2015

Científicos emplean células inmunes de la médula ósea del paciente para tratar el mieloma múltiple

Fuente: http://noticias.lainformacion.com/salud/cancer/cientificos-emplean-celulas-inmunes-de-la-medula-osea-del-paciente-para-tratar-el-mieloma-multiple_Ra7RRWQIBRZCK13mpj4WP3/


En un informe sobre lo que se cree que es el primer ensayo clínico pequeño de su tipo, los investigadores del Centro de Cáncer Kimmel de Johns Hopkins dicen que han utilizado con seguridad células inmunes obtenidas de la propia médula ósea del paciente para tratar el mieloma múltiple, un cáncer de los glóbulos blancos las células.









Los resultados del ensayo con un tipo particular de células T que se dirigen al tumor, conocidas como linfocitos infiltrantes de la médula ósea (MILs, por sus siglas en inglés), se describen en la edición de 'Science Translational Medicine'. "Lo que hemos aprendido en este pequeño ensayo es que un gran número de MILs activos pueden atacar selectivamente y matar las células de mieloma", resume el inmunólogo de Johns Hopkins Ivan Borrello, director del estudio clínico.


MILs son los soldados de infantería del sistema inmune y atacan células extrañas, como bacterias o virus, explica este experto. Pero en su estado normal, están inactivas y son demasiado pocas en número para tener un efecto medible sobre el cáncer. Una investigación anterior del laboratorio de Borrello y sus colegas mostró que MILs activados podrían atacar selectivamente y matar las células de mieloma tomadas de pacientes y cultivadas en frascos de cultivo de laboratorio.


Para el nuevo ensayo clínico, el equipo de Johns Hopkins reclutó a 25 pacientes con mieloma múltiple recién diagnosticado o recidivante, aunque tres de los pacientes recayeron antes de que pudieran recibir la terapia de MILs. Los científicos recogieron MILs de la médula ósea de cada paciente, los cultivaron en el laboratorio para ampliar su número, los activaron con perlas microscópicas recubiertas con anticuerpos activadores inmunes e inyectaron por vía intravenosa a cada uno de los 22 pacientes con sus propias células.


Tres días antes de las inyecciones de MILs, los pacientes recibieron dosis altas de quimioterapia y un trasplante de células madre, los tratamientos estándar para el mieloma múltiple. Un año después de recibir la terapia de MILS, 13 de los 22 pacientes tenían al menos una respuesta parcial a la terapia, lo que significa que su cáncer se había reducido en al menos un 50 por ciento.


Siete pacientes experimentaron al menos una reducción del 90 por ciento en el volumen de las células tumorales y vivieron en promedio 25,1 meses sin progresión del cáncer. Los 15 pacientes restantes presentaban un promedio de 11,8 meses libres de progresión después de la terapia MILs.




Ninguno de los participantes tenía graves efectos secundarios de la terapia con MILs y la supervivencia global fue de 31,5 meses para los que experimentaron una reducción de la enfermedad a menos del 90 por ciento, pero esta cifra no se ha alcanzado aún en aquellos con mejores respuestas. El tiempo medio de seguimiento es actualmente de más de seis años.


Borrello destaca que varios centros de cáncer de Estados Unidos han llevado a cabo tratamientos experimentales similares pero cree que el equipo de Johns Hopkins es el único en utilizar MILs. Se pueden emplear otros tipos de células infiltrantes de tumor pero son generalmente menos abundantes en los tumores de los pacientes y pueden no crecer fuera del cuerpo, según Borrello.


En los tumores no sanguíneos, como el melanoma, sólo alrededor de la mitad de los pacientes tienen células T en los tumores que pueden ser recopiladas y sólo alrededor de la mitad de esas células recolectadas se puede cultivar. "Por lo general, las células inmunes de tumores sólidos, llamadas linfocitos infiltrantes de tumor, se pueden cosechar y cultivar en sólo alrededor del 25 por ciento de los pacientes que podrían ser candidados para la terapia. Pero en nuestro ensayo clínico, fuimos capaces de cosechar y cultivar MILs de los 22 pacientes", destaca Kimberly Noonan, investigadora asociada en la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins.


Gracias a este trabajo, los científicos determinaron cuántos de los MILs cultivados en el laboratorio se dirigen específicamente al tumor del paciente y vieron que los pacientes cuya médula ósea antes del tratamiento contenía un gran número de ciertas células inmunes conocidas como células de memoria centrales, también tuvieron una mejor respuesta a la terapia MILs. Los pacientes que iniciaron el tratamiento con signos de una respuesta inmunitaria hiperactiva no responden tan bien.


Investigadores del Centro Oncológico Kimmel también están desarrollando MILs para tratar tumores sólidos como los de pulmón, esófago y cáncer gástrico, así como los cánceres pediátricos y sarcoma de Ewing. Los expertos señalan que hay más de 20.000 nuevos casos de mieloma múltiple y más de 10.000 muertes cada año en Estados Unidos, siendo el segundo cáncer más común que se origina en la sangre.


Crean neuronas a partir de células de la sangre

Fuente: http://www.tendencias21.net/Crean-neuronas-a-partir-de-celulas-de-la-sangre_a40489.html



Científicos de Canadá han desarrollado células neurales del sistema periférico y del central a partir de células sanguíneas. Esto permitirá analizar de forma más sencilla cómo responde una persona neurológicamente, analizando su sangre, y tendrá aplicaciones en fármacos que afecten al sistema periférico (calmen el dolor) y no al central (no adormezcan).



Tejido cerebral (azul y rojo), tres semanas después de inyectar precursores neurales derivados de sangre (verde). 






Científicos de la Universidad McMaster (Hamilton, Canadá) han descubierto cómo fabricar neuronas sensoriales adultas a partir de la sangre. 


En concreto, los científicos de células madre de McMaster pueden convertir directamente células de la sangre de un humano adulto en neuronas tanto del sistema nervioso central (cerebro y médula espinal), como del sistema nervioso periférico (resto del cuerpo), que son responsables de la percepción del dolor, la temperatura y la picazón. 


Esto significa que la forma en que las células del sistema nervioso de una persona reaccionan y responden a los estímulos, se pueden determinar a partir de su sangre. 


El avance, que aparece en la portada de la revista Cell Reports, fue dirigido por Mick Bhatia, director del Instituto de Investigación en Células Madre y Cáncer de McMaster, y profesor en el Departamento de Ciencias Bioquímicas y Biomédicas. 


Actualmente, los científicos y los médicos tienen una comprensión limitada de la cuestión compleja del dolor y de cómo tratarlo. El sistema nervioso periférico se compone de diferentes tipos de nervios: algunos son mecánicos (sienten la presión) y otros detectan la temperatura (calor). En condiciones extremas, el dolor o el entumecimiento es percibido por el cerebro mediante señales enviadas por estos nervios periféricos. 


"El problema es que a diferencia de la sangre, una muestra de piel o incluso una biopsia de tejido, no se puede coger una pieza del sistema neural de un paciente. Funciona como un cableado complejo por todo el cuerpo y no se pueden tomar muestras para el estudio", explica Bhatia, en la nota de prensa de McMaster.




"Ahora podemos tomar la muestra de sangre de un paciente, como si fuera un chequeo rutinario, y con ella producir un millón de neuronas sensoriales, que conforman los nervios periféricos. También podemos hacer células del sistema nervioso central, ya que la tecnología que transforma células sanguíneas en neuronas crea células madre neurales de forma natural". 


Esta tecnología tendrá muchas aplicaciones, aseguran, como resolver preguntas tales como: ¿Por qué algunas personas sienten dolor y otros entumecimiento? ¿Es esto algo genético? ¿Puede imitarse la neuropatía que sienten algunos pacientes de diabetes en el laboratorio? 


También podría abrir la vía de nuevos fármacos que calmaran el dolor sin adormecer al paciente, es decir, que afectaran al sistema periférico y no al central. Asimismo, aseguran los investigadores, tendrá potencial para pronosticar enfermedades neuropáticas. 


El equipo de Bhatia probó con éxito su proceso usando sangre fresca, pero también criopreservada (congelada), lo que les permite hacer múltiples pruebas. 






Referencia bibliográfica: 


Jong-Hee Lee, Ryan R. Mitchell, Jamie D. Mcnicol, Zoya Shapovalova, Sarah Laronde, Borko Tanasijevic, Chloe Milsom, Fanny Casado, Aline Fiebig-Comyn, Tony J. Collins, Karun K. Singh, Mickie Bhatia: Single Transcription Factor Conversion of Human Blood Fate to NPCs with CNS and PNS Developmental Capacity. Cell Reports (2015). DOI: 10.1016/j.celrep.2015.04.056.

Doce personas con VIH se someten a trasplante de células de cordón umbilical

Fuente: http://www.lavanguardia.com/vida/20150520/54431354039/doce-personas-con-vih-se-someten-a-trasplante-de-celulas-de-cordon-umbilical.html


Nueve personas afectadas de VIH positivo se han sometido ya a un trasplante de células madre de cordón umbilical para reconstruir su sistema inmunitario con la intención de curar la infección y otras tres se someterán a esta intervención en las próximas semanas.


Según ha informado el investigador del Instituto de Investigación del SIDA IrsiCaixa Javier Martínez-Picado, coordinador europeo del proyecto, de las doce personas afectadas, una ha sido intervenida en Barcelona, seis en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid y las otras cinco en otros países europeos.


Se trata de una intervención muy agresiva que no se puede hacer a todos los infectados "porque tiene un riesgo altísimo, ya que hemos de eliminar el sistema inmunitario mediante quimioterapia y radioterapia y hacer un trasplante de células de otra persona y que reconstruyan su sistema inmunitario", ha explicado Martínez-Picado.


La revista "The Lancet VIH" publica el caso de un barcelonés afectado de leucemia y VIH que fue el primero en someterse al trasplante de células de cordón umbilical en el IrsiCaixa y que redujo "drásticamente" su carga viral, aunque falleció a causa de la leucemia que padecía y los investigadores no pudieron acabar de demostrar que se había curado del VIH.


Este barcelonés es el primer caso en el mundo de trasplante de células de cordón umbilical para curar el VIH y se produjo después del único caso que se conoce de curación de infección de VIH, el alemán Timothy Brown, al que en 2007 le trasplantaron células madre de médula ósea que tenían una mutación resistente al VIH.


Como encontrar médulas óseas compatibles y con la mutación resistente al VIH es muy difícil, los investigadores han sustituido la médula ósea con células madre de cordón umbilical "que permite una compatibilidad más relajada", ha indicado Martínez-Picado.


Tras hacer una búsqueda "intensiva" de cordones umbilicales con la mutación resistente al VIH en los bancos de tejidos, los investigadores del IrsiCaixa ya tienen varios para hacer los trasplantes, que, en los casos en que se está probando, tienen una evolución esperanzadora, según Martínez-Picado.


En el caso del barcelonés que acabó muriendo en 2013, los médicos ya habían comprobado que con el trasplante "hubo una reducción dramática de los reservorios virales y si hubiese vivido más tiempo hubiésemos demostrado que se había curado del VIH", ha dicho el investigador.


"Nos hemos puesto a las órdenes de los hematólogos, no para curar el VIH, sino para aprender cómo los trasplantes pueden curarlo y poder hacerlo no sólo cuando hay una enfermedad hematológica grave", ha dicho Martínez-Picado.


El investigador del IrsiCaixa ha avanzado que ahora están explorando la utilización de células de los propios pacientes e inducir la mutación que les hace resistentes al virus para hacer un autotrasplante, "porque las probabilidades de éxito serán mayores".


La investigación se ha llevado a cabo en coordinación con el Instituto Catalán de Oncología (ICO), el Banco de Sangre y Tejidos, y el IrsiCaixa, que coordina el proyecto unificado en el consorcio europeo Epistem, financiado por el amfAR Research Consortium on HIV Eradication (ARCHE), y en el que también participan el University Medical Center de Utrecht (Holanda) y el Hospital Gregorio Marañón de Madrid.



Pilot clinical trial finds injected immune cells safe in multiple myeloma patients

Fuente: http://medicalxpress.com/news/2015-05-clinical-trial-immune-cells-safe.html




Marrow-infiltrating lymphocytes in cell culture. 






In a report on what is believed to be the first small clinical trial of its kind, researchers at the Johns Hopkins Kimmel Cancer Center say they have safely used immune cells grown from patients' own bone marrow to treat multiple myeloma, a cancer of white blood cells.




Results of the trial involving a particular type of tumor-targeting T cell, known as marrow-infiltrating lymphocytes (MILs), are described in the issue of Science Translational Medicine.


"What we learned in this small trial is that large numbers of activated MILs can selectively target and kill myeloma cells," says Johns Hopkins immunologist Ivan Borrello, M.D., who led the clinical trial.


MILs, he explains, are the foot soldiers of the immune system and attack foreign cells, such as bacteria or viruses. But in their normal state, they are inactive and too few in number to have a measurable effect on cancer.


Previous laboratory research by Borrello and his colleagues showed that activated MILs could selectively target and kill myeloma cells taken from patients and grown in laboratory culture flasks.


For the clinical trial, the Johns Hopkins team enrolled 25 patients with newly diagnosed or relapsed multiple myeloma, although three of the patients relapsed before they could receive the MILs therapy.


The scientists retrieved MILs from each patient's bone marrow, grew them in the laboratory to expand their numbers, activated them with microscopic beads coated with immune activating antibodies and intravenously injected each of the 22 patients with their own cells. Three days before the injections of expanded MILs, patients received high doses of chemotherapy and a stem cell transplant, standard treatments for multiple myeloma.


One year after receiving the MILs therapy, 13 of the 22 patients had at least a partial response to the therapy, meaning that their cancers had shrunk by at least 50 percent.


Bone marrow is the spongy tissue inside bone where blood cells are produced. In a new adoptive T cell therapy, Kimberly Noonan and colleagues harnessed T cells from the bone marrow known as marrow-infiltrating lymphocytes to treat multiple myeloma.






Seven patients experienced at least a 90 percent reduction in tumor cell volume and lived, on average, 25.1 months without cancer progression. The remaining 15 patients had an average of 11.8 progression-free months following MILs therapy. None of the participants had serious side effects from the MILs therapy. The overall survival was 31.5 months for those with less than 90 percent disease reduction, but this number has not yet been reached in those with better responses. The average follow-up time is currently more than six years.



Borrello notes that several U.S. cancer centers have conducted similar experimental treatments, known as adoptive T cell therapy, but says the Johns Hopkins team is believed to be the only one to use MILs. Other types of tumor-infiltrating cells can be used, but they are usually less plentiful in patients' tumors and may not grow as well outside the body, says Borrello.


In nonblood-based tumors, such as melanoma, only about one-half of patients have T cells in their tumors that can be harvested, and only about one-half of those harvested cells can be grown. "Typically, immune cells from solid tumors, called tumor-infiltrating lymphocytes, can be harvested and grown in only about 25 percent of patients who could potentially be eligible for the therapy. But in our clinical trial, we were able to harvest and grow MILs from all 22 patients," says Kimberly Noonan, Ph.D., a research associate at the Johns Hopkins University School of Medicine.


Noonan says the small trial helped her and her colleagues learn more about which patients may benefit from MILs therapy. For example, they were able to determine how many of the MILs grown in the lab were specifically targeted to the patient's tumor and whether they continued to target the tumor after being infused.


Additionally, the scientists found that patients whose bone marrow before treatment contained a high number of certain immune cells, known as central memory cells, also had better response to MILs therapy. Patients who began treatment with signs of an overactive immune response did not respond as well.


Noonan says the research team has used these data to guide two other ongoing MILs clinical trials. Those studies, she says, are trying to extend anti-tumor response and tumor specificity by combining the MILs transplant with a Johns Hopkins-developed cancer vaccine called GVAX and the myeloma drug lenalidomide, which stimulates T cell responses.


The researchers say the trials also have shed light on new ways to grow the MILs. "In most of these trials, you see that the more cells you get, the better response you get in patients. Learning how to improve cell growth may therefore improve the therapy," says Noonan.


Kimmel Cancer Center scientists are also developing MILs to treat solid tumors such as lung, esophageal and gastric cancers, as well as the pediatric cancers neuroblastoma and Ewing's sarcoma.


Experts report there are more than 20,000 new cases of multiple myeloma and more than 10,000 deaths each year in United States. It is the second most common cancer originating in the blood.






More information: 

Adoptive transfer of activated marrow-infiltrating lymphocytes induces measurable antitumor immunity in the bone marrow in multiple myeloma, Science Translational Medicine, 2015.stm.sciencemag.org/lookup/doi/… scitranslmed.aaa7014



viernes, 22 de mayo de 2015

hESC-derived cells offer source of macular tissue repair and replacement

Fuente: http://www.news-medical.net/news/20150519/hESC-derived-cells-offer-source-of-macular-tissue-repair-and-replacement.aspx


Subretinal transplantation of retinal pigment epithelium derived from human embryonic stem cells (hESCs) appears to be a well-tolerated means of treating age-related macular degeneration and Stargardt’s macular dystrophy, suggest two open-label phase I/II studies.


Due to their immunoprivileged nature, hESCs have great therapeutic potential particularly for diseases affecting the eye, say Steven Schwartz (Jules Stein Eye Institute, Los Angeles, California, USA) and colleagues. But they add that “their plasticity and unlimited capacity for self-renewal raises concerns about serious safety issues”.


The researchers assessed the safety and tolerability of subretinal transplantation of hESC-derived retinal pigment epithelium in nine patients with Stargardt’s macular dystrophy and nine with atrophic age-related macular degeneration. The median age of the patients was 50 years and 77 years, respectively.


Three doses of cells – 50,000, 100,000 and 150,000 – were injected into the eye with the worst vision for each disorder and the patients took an immunosuppressant for a week before surgery and for 12 weeks afterwards.


Over a median follow-up of 22 months, no systemic safety issues were identified and concerns regarding teratoma formation, immune reactions and differentiation of cells into unwanted ectopic cell types were not realised.


The only adverse events were those characteristic of pars plana vitrectomy surgery, note the researchers, including preretinal patches of non-contractile, transplanted retinal pigment epithelium in three eyes and endophthalmitis in one patient.




An increase in subretinal pigmentation, symbolic of successful transplantation, was seen in 13 of the 18 patients. And visual acuity, although tested as a safety measure for monitoring vision loss, improved following surgery in 10 eyes, remained the same or improved in seven eyes, and decreased by more than 10 letters in one eye. The untreated fellow eyes did not show similar improvements.


Improvements following transplantation were seen for general and peripheral vision as well as near and distance activities, increasing by 16 to 25 points in the 3 to 12 months following surgery in patients with atrophic age-related macular degeneration and by 8 to 20 points in those with Stargardt’s macular dystrophy.


For eight patients, visual acuity improved by at least 15 letters during the first year after transplantation, corresponding to a clinically significant “doubling of the visual angle”, the team writes in The Lancet.


In a related commentary, Anthony Atala (Wake Forest University School of Medicine, Winston-Salem, North Carolina, USA), says the study is “a major accomplishment”.


“Much work remains to be done before hESC and induced pluripotent stem cell therapies go beyond regulatory trials, but the path is now set in motion”, he concludes.


miércoles, 20 de mayo de 2015

El Hospital Gregorio Marañón de Madrid usa una técnica pionera en trasplante de linfoma de Hodgkin con donantes haploidénticos

Fuente: http://www.telecinco.es/informativos/sociedad/Gregorio-Maranon-Madrid-Hodgkin-haploidenticos_0_1989750350.html



Hematólogos del Grupo Español de Trasplante Hematopoyético, que lidera el Servicio de Hematología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, están utilizando una nueva técnica de trasplante de células madre hematopoyéticas de médula ósea en linfoma de Hodgkin, utilizando como donante uno de los familiares haploidéntico, es decir, un donante mitad idéntico con el paciente (padre, madre, hijos o hermanos).




La novedad de la técnica consiste en utilizar dosis reducidas de fármacos antes del trasplante y dosis altas de quimioterapia inmunosupresora tras el mismo, lo que reduce considerablemente la toxicidad a la vez que previene la temida enfermedad de injerto contra huésped. Tras el trasplante, los pacientes recuperan la función de la médula ósea a los 16-18 días del trasplante, mostrando un cien por cien de células procedentes de su donante a partir de los 30 días.


La originalidad de esta modalidad de trasplante radica en que se utilizan progenitores de médula ósea o sangre periférica completa del donante no idéntico, sin modificar su contenido celular como se venía haciendo hasta ahora en este tipo poco habitual de trasplantes, y adicionalmente se previene la enfermedad de injerto contra huésped administrando quimioterapia inmunosupresora, en altas dosis, tras el trasplante.




Y es que, solo entre 25 o 30 por ciento de los pacientes que necesitan un trasplante hematopoyético disponen de un hermano HLA idéntico, siendo preciso iniciar una búsqueda de donante no emparentado o sangre de cordón umbilical en unos 100 pacientes cada año en la Comunidad de Madrid. Además, solo un 50 por ciento de los que inician una búsqueda llegan a realizarse el trasplante debido fundamentalmente a que no disponen de un donante apropiado.


Son estos casos los que más se benefician del trasplante haploidéntico, así como aquellos en los que por la urgencia del tratamiento no disponen del tiempo necesario para encontrar un donante que habitualmente son 2 o 3 meses.


Por tanto, gracias a esta estrategia, el 95 por ciento de los pacientes candidatos a trasplante alogénico disponen potencialmente de un donante apropiado entre sus familiares de primer grado. Además, dado que, de esta manera, el acondicionamiento del paciente que va a recibir el trasplante resulta menos tóxico, puede darse en enfermos de edades avanzadas, con complicaciones asociadas de otros órganos o, incluso, para rescatar a aquellos en los que ha fracasado un trasplante previo.


Todo ello, abre "grandes posibilidades" en cuanto a facilitar, extender y abaratar la modalidad terapéutica del trasplante de progenitores hematopoyéticos, muy útil en el tratamiento eficaz de numerosos cánceres y enfermedades hematológicas.


En los últimos 7 años, se han realizado en el Hospital Gregorio Marañón más de 70 trasplantes haploidénticos de progenitores hematopoyéticos, con resultados alentadores en pacientes con neoplasias hematológicas de alto riesgo.


Human stem cells may improve bone healing in diabetics

Fuente: http://www.alphagalileo.org/ViewItem.aspx?ItemId=152792&CultureCode=en


Adding stem cells from human bone marrow to a broken diabetic bone enhances the repair process, increasing the strength of the newly formed bone, according to a laboratory-based study presented at the European Congress of Endocrinology in Dublin. The work could potentially lead to more effective treatments for broken bones.


Bones of diabetic people are known to be more fragile than non-diabetic people and take longer to heal after fracturing. What’s more, diabetic people are more likely to sustain fractures as a result of fall than non-diabetics as they often suffer from impaired vision and reduced sensitivity in their feet.


The research team at the National University of Galway, led by Dr Cynthia Coleman, are aiming to harness the reparative properties of stem cells to improve fracture repair in diabetic patients.


The researchers added human bone marrow stem cells from a non-diabetic donor to a bone fracture in laboratory pre-clinical studies. They found that stem cells healed the broken bone more efficiently than those that did not receive stem cells. In addition, the healed bones resulting from stem cell treatment were found to be significantly stronger and able to withstand more stress than those in the control group.


Dr Coleman and her group have developed a sensitive test to allow them to detect the location and number of the stem cells after they’ve been added; they report that the stem cells do not permanently integrate into the host tissue but instead produce signals that encourage the host’s own cells to heal the fracture more efficiently.


Dr Coleman has said, “this basic science study allows us to better understand the role of stem cells in fracture repair and potential use in treating diabetic patients.” Her future work will involve learning more about the role of stem cells in healing so that we can one day use them in the clinic. “Stem cells represent an exciting potential for improving the treatment and lessening the pain and discomfort of diabetic people who break bones”, he said.


viernes, 15 de mayo de 2015

Fabrican hueso solo con algunas proteínas de las células madre

Fuente: http://www.tendencias21.net/Fabrican-hueso-solo-con-algunas-proteinas-de-las-celulas-madre_a40417.html


El uso de células madre para la fabricación de nuevos huesos parece prometedor, pero estas células, una vez implantadas en el organismo, pueden provocar tumores. Investigadores estadounidenses han encontrado ahora la manera de aprovechar las células madre eludiendo este riesgo: sacándolas las proteínas que fomentan el crecimiento de los huesos e implantándolas en ratones. El resultado fue la creación de tejido óseo en la misma cantidad que si se hubiese hecho el implante con las células madre completas, aseguran. 



Micrografía de células madre embrionarias de ratón teñidas con un marcador fluorescente verde.






El desarrollo artificial de tejidos orgánicos es un sueño que persigue la ciencia desde hace años. La finalidad es usar, algún día, estos tejidos en la fabricación de órganos o huesos. 


En lo que se refiere al desarrollo de tejidos óseos, hasta ahora se ha avanzado por distintas vías. Por ejemplo, en los Países Bajos se ha conseguido imitar en laboratorio el proceso natural de formación de los huesos, así como observar dicho proceso con gran detalle. Además, hace un par de años, investigadores granadinos patentaron un nuevo biomaterial que permite generar tejido óseo, esto es, huesos artificiales, a partir de células madre procedentes de cordón umbilical. 


El tema del uso de células madre para tal fin parece, por tanto, una posibilidad alentadora. El problema es que, como se ha demostrado, una vez que se implantan estas células en un organismo, estas proliferan, pudiendo desarrollar no solo el tejido, el órgano o el hueso deseados, sino también tumores. 



Ahora, un equipo de científicos de los Institutos Gladstone de San Francisco (EEUU) han descubierto una manera de regenerar el tejido óseo aprovechando las células madre, pero reduciendo el riesgo de estas. 


En concreto, los investigadores comprobaron que se pueden usar las proteínas producidas por dichas células –en lugar de las células madre en sí- para crear hueso nuevo. Entre estas proteínas estarían las llamadas proteínas morfogénicas óseas (BMPs), que son factores de crecimiento con la capacidad de inducir fuertemente la formación de hueso nuevo (al igual que cartílago y tejido conjuntivo). 


La tecnología podría ayudar a tratar a víctimas de traumatismos en extremidades, como soldados heridos en combate o personas heridas tras un desastre natural. Según un comunicado institucional, el enfoque resulta tan eficaz como el tratamiento estándar actual con células madre, en lo a cantidad de hueso creado se refiere.




El proceso desarrollado por los científicos consiste en tratar células madre con productos químicos para obtener de ellas aquellos factores esenciales que envían la señal de regeneración de tejido nuevo. 


A continuación, estas señales sustraídas -o proteínas- son colocadas en el tejido muscular de ratones, para facilitar el crecimiento de hueso nuevo. 


Según los investigadores, el método estándar actual implica moler viejos huesos para extraer de ellos esas mismas proteínas y factores de crecimiento necesarios para estimular el crecimiento de nuevo hueso. Sin embargo, este enfoque presenta restricciones significativas, dado que ha de tomar dichos huesos de cadáveres. Estos son muy variables en términos de calidad de los tejidos y de la cantidad de señales de crecimiento que de ellos se pueden obtener. Además, al igual que sucede con la donación de órganos, el tejido de cadáver no siempre está disponible. 


"Estas limitaciones hacen necesario contar con un material de origen más consistente y reproducible, para la regeneración de tejidos", explica Todd McDevitt, director de la investigación. “Como recurso renovable a la vez escalable y consistente, las células madre pluripotentes son una solución ideal", concluye.





Referencia bibliográfica: 

Ken Sutha, Zvi Schwartz, Yun Wang, Sharon Hyzy, Barbara D. Boyan, Todd C. McDevitt. Osteogenic Embryoid Body-Derived Material Induces Bone Formation In Vivo. Scientific Reports (2015). DOI: 10.1038/srep09960.

sábado, 9 de mayo de 2015

Nuevo tipo de células madre para el desarrollo de órganos de sustitución

Fuente: http://www.tendencias21.net/Nuevo-tipo-de-celulas-madre-para-el-desarrollo-de-organos-de-sustitucion_a40376.html


Fabricar órganos de sustitución es uno de los sueños de la medicina regenerativa. Para ello, se trabaja con las células madre embrionarias, que pueden generar cualquier tipo de tejido para esos órganos. Un equipo internacional de científicos ha descubierto ahora un tipo de estas células con mejores propiedades para tal fin, pues proliferan y se especializan de manera más eficiente. 




En verde, nuevo tipo de célula madre humana integrándose y desarrollándose en el entorno celular de un embrión de ratón no viable. En rojo, células del linaje del endodermo que pueden dar lugar al tejido que cubre los órganos de los aparatos digestivo y respiratorio.






La fabricación de órganos de sustitución es un objetivo en el que trabajan diversos grupos de investigación del planeta. Su finalidad es conseguir, algún día, que cualquiera que necesite uno de estos órganos pueda tenerlo, sin necesidad de esperar a que un donante se lo ceda. 


Sin embargo, como es obvio, alcanzar este objetivo no es tarea sencilla. Para lograrlo, los científicos trabajan con los constructores más básicos de nuestros órganos: las células madre, que son unas células embrionarias que, por diferenciación a lo largo del desarrollo fetal, van generando los diversos tejidos del organismo. 


Hasta la fecha, en los estudios científicos, estas células se han usado teniendo en cuenta el momento en que se encontraban, dentro del desarrollo embrionario. Es decir, que los investigadores las usaban considerando el factor temporal. 


Ahora, un equipo de científicos del Salk Institute de La Jolla (California, EEUU), en colaboración, entre otros, con investigadores del Hospital Clínic de Barcelona, la Universidad Católica de Murcia y la Clínica CEMTRO de Madrid, han cambiado este enfoque basado en el tiempo; pues han hallado un tipo de células madre caracterizadas por su ubicación en el embrión (específicas de una zona concreta de este) que son capaces de convertirse en cualquier tipo de tejido y que proliferan en laboratorio mejor que las otras. 





Bautizadas como “células madre pluripotentes de región selectiva” (rsPSCs, por sus siglas en inglés), las células halladas presentan unas características que hacen posible su producción a gran escala e incluso su alteración genética (editando su ADN celular). Ambas posibilidades son cruciales para las terapias de sustitución celular. 


La facilidad con que las rsPSCs proliferan fue comprobada tras aplicarles un cóctel de señales químicas. Estas señales consiguieron que estas células, ubicadas en una placa de laboratorio, se orientaran en el espacio y, en concreto, se identificaran como parte de la región posterior de un embrión de ratón. 


A continuación, los científicos insertaron las rsPSCs en regiones parcialmente diseccionadas de embriones de ratón y las tuvieron en cultivo durante 36 horas. Para poder comparar esta nueva metodología con las ya existentes, también insertaron en dichos embriones, por separado, células madre humanas cultivadas con métodos convencionales. 


El resultado fue que, mientras estas últimas no se integraron en el embrión, las rsPSCs humanas sí lo hicieron. Además, una vez colocadas en el embrión, iniciaron los procesos de diferenciación que las convertirían en células de los tejidos de las tres capas germinales de un embrión natural: endodermo, mesodermo y ectodermo.





Según explica Juan Carlos Izpisua Belmonte, investigador del Instituto Salk y director del estudio en un comunicado de dicho centro, “las células específicas de zona que hemos descubierto podrían proporcionar ventajas tremendas para el estudio en laboratorio del desarrollo, la evolución y las enfermedades; y además abren vías para la generación de nuevas terapias”. 


Pero los resultados no solo proporcionan una nueva forma de analizar el desarrollo humano temprano, sino que además ofrecen una nueva esperanza para el cultivo de tejidos y órganos humanos en un animal huésped. 


Los investigadores concluyen que, por tanto, “no solo necesitamos considerar el tiempo, sino también las características espaciales de las células madre. Comprender ambos aspectos de la identidad de estas células puede resultar crucial para generar tipos de células maduras y funcionales para la medicina regenerativa ”. 





En 2013, Izpisúa Belmonte y sus colaboradores alcanzaron otro hito científico al conseguir crear estructuras renales tridimensionales en cultivo utilizando células madre humanas, algo que hasta entonces jamás se había logrado. 


Para crear estas estructuras renales tridimensionales, los investigadores utilizaron células madre embrionarias y células madre pluripotentes inducidas (iPS) ‎, obtenidas a partir de células humanas de la piel. 


Aplicando un protocolo desarrollado por Izpisúa y su equipo, se consiguió convertir dichas células en células progenitoras del sistema de filtración y colección renal, en tan solo cuatro días en cultivo. Una vez logrado esto, las células fueron puestas en cultivo conjuntamente con células de blastema metanéfrico de ratón (una estructura del riñón embrionario). 


El resultado fue que los dos tipos de células se ensamblaron formando estructuras tridimensionales similares al riñón embrionario, con un sistema colector exclusivamente formado por células humanas. Con el tiempo, estas células progenitoras humanas recapitularon, en cultivo, los procesos de desarrollo del riñón humano. 


Se espera que este otro avance facilite la investigación de enfermedades renales, el descubrimiento de nuevos fármacos y sea un paso más hacia la aplicación de terapias basadas en el uso de células madre. 


Otros avances recientes hacia el desarrollo artificial de órganos han sido la primera impresión en 3D de un sistema circulatorio (imprescindible para el crecimiento de grandes tejidos complejos) o un innovador método de ingeniería de tejidos que ha demostrado ser útil para crear cantidades grandes de hueso humano maduro para trasplantes y en órganos vitales, como el hígado y el páncreas.






Referencia bibliográfica: 

Jun Wu, Daiji Okamura, Mo Li, Keiichiro Suzuki, Chongyuan Luo, Li Ma, Yupeng He, Zhongwei Li, Chris Benner, Isao Tamura, Marie N. Krause, Joseph R. Nery, Tingting Du, Zhuzhu Zhang, Tomoaki Hishida, Yuta Takahashi, Emi Aizawa, Na Young Kim, Jeronimo Lajara, Pedro Guillen, Josep M. Campistol, Concepcion Rodriguez Esteban, Pablo J. Ross, Alan Saghatelian, Bing Ren, Joseph R. Ecker, Juan Carlos Izpisua Belmonte. An alternative pluripotent state confers interspecies chimaeric competency. Nature (2015). DOI: 10.1038/nature14413.