lunes, 10 de febrero de 2014

Nuevos métodos de obtención de células madre

Fuente: http://www.aceprensa.com/articles/hallan-dos-nuevos-metodos-de-crear-celulas-madre/


La semana pasada se publicaron en Nature dos experimentos con los que se han logrado nuevos métodos de obtener células madre. Ambos ofrecen algunas ventajas con respecto a los conocidos hasta ahora, pero dejan sin resolver otras dificultades que impiden la aplicación terapéutica.

El primero sirve para conseguir células madre embrionarias sin destruir embriones. Empieza, como en el diagnóstico genético preimplantatorio, extrayendo una sola célula de las ocho que tiene un embrión de unos tres días. En la reproducción asistida, se examina la célula (a menudo se extraen dos), y si no se encuentran anomalías, se puede implantar el embrión, capaz en principio de seguir desarrollándose con las células restantes.

En el trabajo recién publicado, un equipo dirigido por Karl Tryggvason, del Instituto Karolinska de Suecia, logró un cultivo de células madre embrionarias a partir de la única extraída, mediante la proteína humana LN-521. Este es el adelanto real, pues hasta ahora para hacer proliferar células embrionarias se usan factores de crecimiento animales que las contaminan y las vuelven peligrosas para los pacientes humanos. No destruir embriones ya era posible, pero los que trabajan con embriones humanos nunca se habían preocupado por eso.

Según Tryggvason, su método elimina los reparos éticos al uso de células madre embrionarias, pues el embrión empleado se puede, en teoría –precisa–, implantar en el útero de una mujer y ser gestado. Pero quedan otras cuestiones morales: por qué se crearon in vitro los embriones humanos empleados y si está justificado ponerlos en peligro con la extracción de una célula para beneficio ajeno (pues el análisis genético inutiliza la célula para el cultivo de células madre).

Por otro lado, el procedimiento no elimina del todo el riesgo de alteraciones de las células en el cultivo ni reduce el de que produzcan teratomas cuando se injerten, que es un grave inconveniente de las células embrionarias.

Además, como esas células no proceden del propio paciente –a diferencia de las multipotentes y las pluripotentes inducidas o iPS–, subsiste el problema del rechazo. Para disponer de células madre compatibles con prácticamente cualquier paciente sería necesario emplear muchos embriones genéticamente distintos. Trygvasson estima que harían falta unas 150-200 líneas celulares.


El segundo experimento, de la científica japonesa Haruko Obokata, ha logrado células STAP (“stimulus-triggered acquisition of pluripotency”, o adquisición de pluripotencialidad por estimulación), que son equivalentes a las iPS. El interés está en la manera de inducir la pluripotencialidad en células somáticas. Shinya Yamanaka, el descubridor de las iPS, lo consiguió reprogramándolas mediante la inserción de unos genes por medio de retrovirus. Variantes posteriores mejoran el método original reduciendo el número de genes o empleando vectores menos peligrosos. El descubierto por Obokata es el más sencillo de todos: basta sumergir las células “adultas” en un baño ligeramente ácido durante media hora. También se consigue lo mismo comprimiéndolas, pero el rendimiento es mucho menor.

El sorprendente resultado parece obedecer a que el método desencadena en laboratorio la misma respuesta natural del organismo para reparar heridas causadas por agentes externos. Así, las células STAP, al no ser producto de manipulación genética, son mucho más seguras que las iPS. En efecto, el equipo de Obokata obtuvo células STAP de ratón y las implantó en embriones de ratón, donde generaron distintos tejidos, como las células madre embrionarias. Luego vigiló los animales así nacidos durante dos años, sin que detectara anomalías.

Pero Obokata no ha conseguido por ahora repetir el resultado con células humanas. Y si finalmente lo logra, aún habrá que comprobar con más cuidado que no forman tumores.

Como ocurre siempre en materia de células madre, el descubrimiento es la noticia, pero no el final. Después ha de pasar mucho tiempo hasta saber si las esperanzas creadas se cumplen o se frustran. Hasta hoy, las modestas células madre multipotentes, presentes en el organismo adulto, que solo dan lugar a un limitado número de tejidos, son las únicas que han dado algunos frutos terapéuticos.

Reprograman células de la piel para secretar insulina para combatir la diabetes tipo 1

Fuente: http://ecodiario.eleconomista.es/salud/noticias/5522832/02/14/Reprograman-celulas-de-la-piel-para-secretar-insulina-para-combatir-la-diabetes-tipo-1.html


Científicos de los Institutos Gladstone, en San Francisco, California, Estados Unidos, han aprovechado el poder de la medicina regenerativa para desarrollar una técnica en modelos animales que podría reponer las células destruidas por la diabetes tipo 1. Los hallazgos del equipo, publicados en la edición digital de la revista 'Cell Stem Cell', son un paso importante para liberar a toda una generación de pacientes de las inyecciones que deben ponerse de por vida que caracterizan a esta devastadora enfermedad.



La diabetes tipo 1, que suele manifestarse durante la infancia, es causada por la destrucción de las células beta, un tipo de células que normalmente reside en el páncreas y produce una hormona llamada insulina, sin la cual, los órganos del cuerpo tienen dificultad para absorber los azúcares, como la glucosa, de la sangre. La enfermedad se puede controlar midiendo los niveles de glucosa y mediante inyecciones de insulina, aunque una mejor solución sería recolocar las células beta que faltan. Sin embargo, estas células son difíciles de conseguir, por lo que los investigadores se han centrado en la tecnología de células madre como una manera de fabricarlas.

"El poder de la medicina regenerativa es que potencialmente puede proporcionar una fuente ilimitada de células beta funcionales productoras de insulina que pueden ser trasplantadas en el paciente", destaca el doctor Ding, quien también es profesor en la Universidad de California, San Francisco (UCSF), con la que los Institutos Gladstone están afiliados. "Pero los intentos anteriores para producir grandes cantidades de células beta saludables y desarrollar un sistema viable no han tenido un éxito total. Así que cogimos un enfoque algo diferente".

Uno de los principales desafíos para la generación de grandes cantidades de células beta es que estas células tienen una capacidad regenerativa limitada, por lo que, una vez que maduran, es difícil hacer más. Así que el equipo de investigadores de este trabajo decidió dar un paso atrás en el ciclo de vida de la célula.

Los científicos reunieron primero células de la piel, llamadas fibroblastos, de ratones de laboratorio y, luego, mediante el tratamiento de los fibroblastos con un "cóctel" único de moléculas y factores de reprogramación, las transformaron en células similares a las del endodermo, que son un tipo de células que se encuentra en el embrión temprano y que finalmente maduran en los órganos principales del cuerpo, incluyendo el páncreas.

"Mediante el uso de otro cóctel químico, transformamos estas células del endodermo en células que imitaban las células del páncreas como al principio, que denominamos PPLC", relata el académico postdoctoral de Gladstone Ke Li, autor principal del artículo.

"Nuestro objetivo inicial era ver si podíamos lograr que estas PPLC maduraran para convertirse en células que, al igual que las células beta, respondan a las señales químicas correctas y, lo más importante, secreten insulina. Y nuestros experimentos iniciales, realizados en una placa de Petri, revelaron que lo hicieron", prosigue.

El equipo de investigación entonces quería ver si ocurría lo mismo en modelos de animales vivos, así que trasplantaron PPLC en ratones modificados para tener hiperglucemia (altos niveles de glucosa), un indicador clave de la diabetes.

"Apenas una semana después del trasplante, los niveles de glucosa de los animales empezaron a descender acercándose gradualmente a niveles normales --continúa Li--. Y cuando quitamos las células trasplantadas, vimos un pico inmediato de glucosa, que revela una relación directa entre el trasplante de la PPLC y la reducción de la hiperglucemia".

Cuando el equipo analizó los ratones ocho semanas después del trasplante, vio los cambios más dramáticos: las PPLC habían dado paso a células betas secretoras de insulina completamente funcionales. "Estos resultados no hacen sino resaltar el poder de las pequeñas moléculas en la reprogramación celular y son una prueba de principio de que algún día podrían ser usadas como un enfoque terapéutico personalizado en los pacientes", afirma Ding.

"Estoy particularmente entusiasmado con la idea de traducir estos resultados al sistema humano -afirma Matthias Hebrok, uno de los autores del estudio y director del Centro de Diabetes de UCSF--. En lo inmediato, esta tecnología en células humanas podría proporcionar avances significativos en nuestra comprensión de cómo los defectos inherentes en células beta provocan diabetes, acercándonos notablemente a la tan necesaria cura".

El parto en casa multiplica por cuatro el riesgo de muerte del recién nacido

Fuente: http://www.abc.es/salud/noticias/20140204/abci-parto-casa-riesgo-muerte-201402031719.html






Nuestras abuelas daban a luz en casa, nuestras madres ya lo hicieron en el hospital y ahora existen corrientes que reivindican la vuelta al parto en el domicilio para evitar una excesiva medicalización del momento y disfrutar del momento con mayor intimidad.

El pasado mes de junio una investigación publicada en BMJ ya advertía de que aunque las complicaciones graves de un parto son menos frecuentes si éste se produce en el domicilio, dar a luz en casa sólo está indicado en mujeres con poco riesgo y que ya hayan tenido más hijos.

Ahora, un nuevo estudio, presentado durante el congreso anual de Sociedad de Medicina Materno-Fetal, alerta de que los bebés nacidos en el domicilio con ayuda de matronas tienen un riesgo cuatro veces mayor de morir durante el primer mes de vida que aquellos que vinieron al mundo en hospitales, ayudados también por matronas. La investigación concluye que el incremento del riesgo de mortalidad neonatal no está en el profesional que atiende el parto sino en el lugar.

El número de nacimientos en casa en EE.UU. ha aumentado en la última década. En el mayor estudio realizado sobre este tema, usando como fuente los datos de los Centros de Control de Enfermedades, investigadores del Centro Médico New York-Presbyterian/Weill Cornell encontraron que el riesgo absoluto de mortalidad neonatal era de 3,2 por cada 10.000 nacimientos en hospitales con matrona y de 12,6 por cada 10.000 nacimientos con matrona en casa, una cifra que se eleva a 21,9 por cada 10.000 en el caso de que la parturienta del domicilio sea primeriza. La mortalidad neonatal se define como las muertes de bebés hasta los 28 días de nacer.

«Este riesgo aumentaba siete veces si era el primer embarazo de la madre, y alrededor de diez veces en los embarazos más allá de las 41 semanas», explica el doctor Amos Grunebaum, autor principal del estudio.

De acuerdo a los resultados de la investigación, el doctor Amos Grunebaum y el doctor Frank Chervenak, autores principales, consideran que los ginecólogos tienen la obligación ética de explicar a sus pacientes los riesgos asociados a dar a luz en casa a los futuros padres que expresen interés, e intentar disuadirlos.

Al mismo tiempo, en su opinión, los hospitales deberían crear un entorno confortable, evitando las intervenciones obstétricas innecesarias, dos de las razones por las que los padres suelen preferir el parto en casa.

domingo, 9 de febrero de 2014

No todas las células pueden reprogramarse a pluripotentes

Fuente: http://www.abc.es/salud/noticias/20140130/abci-celula-reprogramar-velocidad-201401301345.html






Un axioma fundamental de la biología solía decir que el destino de una célula es como una calle de sentido único, una vez que una célula se compromete a convertirse en células del músculo, piel o de la sangre, seguirá siendo el resto de su vida una célula del músculo, la piel o una célula sanguínea. Pero los axiomas están para refutarlos, y hace apenas 10 años, un científico japonés llamado Shinya Yamanaka, -galardonado en 2012 con el Premio Nobel de Medicina- introdujo cuatro factores simples en las células de la piel y las devolvió a un estado similar al embrionario, lo que hizo que la célula se convirtiera en casi cualquier tipo de célula en el cuerpo.

El descubrimiento de que las células adultas se podían reprogramar inició una desenfrenada carrera para su aplicación en la clínica. Carrera que puede haber iniciado una nueva era tras los resultados publicados en la revista «Nature» en los que otros investigadores japoneses del Instituto Riken, acaban de descubrir un método más sencillo y fácil para reprogramar las células adultas.

Sin embargo, la técnica propuesta por Yamanaka ha resultado compleja y lenta. Ahora, un estudio realizado en la Escuela de Medicina de Yale, en EE.UU., asegura haber identificado el gran obstáculo para la conversión de las células a su estado juvenil: la clave estaría en la velocidad del ciclo celular, es decir, el tiempo que tarda una célula en dividirse.

Los investigadores explican en el estudio que se publica en «Cell» que cuando el ciclo celular se acelera a una velocidad determinada las barreras que determinan el destino de una célula disminuyen. Y en este estado, aseguran, es más fácil «persuadir» a las células para que alteren su identidad y se transformen en células pluripotentes, o capaces de convertirse en múltiples tipos diferentes de células.


Por ejemplo, señala Shangqin Guo, «es como cuando se aumenta la temperatura para hacer que una barra de acero pueda moldearse». Según Guo, «una vez que se ha acelerado el ciclo celular, las células no parecen poner las mismas barreras para convertirse en pluripotentes».

El equipo de Guo trabajó con las células que forman la sangre, que al dividirse experimentan cambios específicos en su ciclo celular para producir nuevas células sanguíneas. Se sabe que las células progenitoras de sangre solamente producen nuevas células sanguíneas; sin embargo, con la técnica de Yamanaka a veces, pero no siempre, se logra que estas células se conviertan en otros tipos diferentes de células. Y gracias al nuevo trabajo de «Cell» ahora ya se sabe que dichas células tienden a convertirse en pluripotentes cuando el ciclo celular se completa en ocho horas o menos, una velocidad inusual para las células adultas, mientras que aquellas que se dividen más lentamente, siguen siendo células sanguíneas.


«Este descubrimiento cambia la forma de pensar acerca de cómo modificar el destino de una célula y, además, revela que una función básica ‘doméstica’ de la célula, como es la duración del ciclo celular, tiene en realidad un gran impacto sobre el cambio en el destino de la célula», reconoce Haifan Lin, director del Centro Yale de Células Madre .

Pero el trabajo posee otras implicaciones además de explicar cómo se produce este «cuello de botella» en la reprogramación celular. Guo apunta que muchas enfermedades humanas están asociadas con alteraciones en el establecimiento de la identidad celular adecuada, así como anomalías en el comportamiento del ciclo celular.

Microscopía robótica y células madre para desarrollar terapias contra el parkinson y el alzheimer

Fuente: http://neurologia.publicacionmedica.com/noticia/microscopia-robotica-y-celulas-madre-para-desarrollar-terapias-contra-el-parkinson-y-el-alzheimer


Steven Finkbeiner, director asociado del Instituto Gladstone de Enfermedades Neurológicas de la Universidad de California (San Francisco, Estados Unidos), ha presentado en el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra los resultados de su trabajo experimental.

Steven Finkbeiner y Montserrat Arrasate.



La mayoría de los casos de enfermedad de Parkinson y enfermedad de Alzheimer no están causados por mutaciones genéticas identificables, por lo que no existen modelos experimentales fiables que reproduzcan la enfermedad. Los investigadores del Instituto Gladstone están trabajando en células madre para intentar desarrollar terapias contra estas enfermedades neurodegenerativas. “Nuestro proyecto consiste en utilizar células de la piel de pacientes, convertirlas en neuronas y estudiarlas en el laboratorio. El objetivo es comprender las causas de las formas más comunes de alzheimer y parkinson”, ha explicado Finkbeiner.

En la actualidad, no existe ningún fármaco aprobado que trate las principales enfermedades neurodegenerativas. “Ha habido muchas pruebas que parecían prometedoras en modelos animales pero después fallaron en ensayos clínicos, dadas las diferencias entre ratones y personas. Por ello, hay que disponer de un sistema que encuentre fármacos biológicos humanos que nos ayuden a encontrar mecanismos de la enfermedad y terapias efectivas para los enfermos”.

El trabajo de Finkbeiner combina una metodología basada en microscopía robótica con modelos de células madre pluripotentes de enfermedades neurodegenerativas, para crear una plataforma que encuentre fármacos y dianas terapéuticas para la enfermedad. “El microscopio robótico automatizado nos permite seguir la vida y muerte de las neuronas en el laboratorio, de forma similar a los ensayos clínicos con personas. Es unas 1.000 veces más sensible que los métodos habituales y lo usamos para descifrar el complejo proceso de la neurodegeneración. Solíamos pensar que todos los cambios que suceden en el cerebro durante estas enfermedades eran perjudiciales. Pero con este procedimiento hemos descubierto que el cerebro trata de hacer frente activamente a las enfermedades neurodegenerativas. Algunos de los cambios que vemos son beneficiosos y enlentecen el proceso de la enfermedad”.

El primer microscopio robótico fue desarrollado en el laboratorio de Finkbeiner por Montserrat Arrasate, investigadora del Laboratorio de Neurobiología Celular del CIMA. “Una de las características comunes de las enfermedades neurodegenerativas es el depósito anormal de proteínas en el cerebro de los pacientes. Arrasate demostró que los cuerpos de inclusión que se acumulan en la enfermedad de Huntington eran una respuesta reactiva: secuestran la proteína que causa la enfermedad dentro de una estructura de la célula que está relativamente inerte”, ha detallado Finkbeiner.



La combinación de esta metodología con modelos de células madre pluripotentes podría mejorar el abordaje terapéutico de las enfermedades neurodegenerativas. “Todavía es pronto para saber si tendrá repercusión en futuros ensayos clínicos. Pero por primera vez nos ha permitido estudiar las formas más comunes de parkinson y alzheimer”.

En la actualidad no se sabe si estas neuropatologías comparten una causa común o tienen causas distintas que se manifiestan de forma similar en la clínica. “Estudiando células madre de pacientes podremos tratar de descubrirlo. La respuesta tiene grandes implicaciones para el desarrollo de ensayos clínicos eficaces. Si estas enfermedades tienen muchos orígenes y algunas terapias sólo funcionan para algunas de las causas, pueden fallar en ensayos clínicos, lo que supone un gasto sanitario enorme. El estudio con células madre pluripotentes ayudará a diseñar ensayos clínicos más sensibles para detectar si el fármaco es efectivo y a identificar subgrupos de pacientes que se puedan beneficiar”.

Identifican una proteína como nueva diana para el tratamiento de la leucemia

Fuente: http://ecodiario.eleconomista.es/salud/noticias/5509218/02/14/cientificos-identifican-una-proteina-como-nueva-diana-para-el-tratamiento-de-la-leucemia.html


Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de California San Diego, en Estados Unidos, han identificado una proteína esencial para la función de las células madre hematopoyéticas, que dan lugar a todas las demás células de la sangre, y la formación de la sangre. El descubrimiento tiene potencial como nueva diana para el tratamiento de la leucemia porque las células madre del cáncer se basan en la misma proteína para regular y sostener su crecimiento.



En un artículo que se publica en la edición digital de 'Nature Genetics', la investigadora principal de este estudio, Tannishtha Reya, profesora en el Departamento de Farmacología de la Universidad de California y sus colegas encontraron que una proteína llamada Lis1 regula fundamentalmente la división asimétrica de las células madre hematopoyéticas, asegurando que las células madre se diferencian correctamente para proporcionar un suministro adecuado y sostenido de nuevas células sanguíneas.

Una división asimétrica se produce cuando una célula madre se divide en dos células hijas de forma desigual: una célula hija se diferencia en un tipo de célula especializada de forma permanente mientras que la otra permanece indiferenciada y es capaz de más divisiones.

"Este proceso es muy importante para la generación adecuada de todas las células necesarias para el desarrollo y la función de muchos tejidos normales", apunta Reya. Cuando las células se dividen, Lis1 controla la orientación del huso mitótico, un aparato de fibras subcelulares que segrega los cromosomas durante la división celular.

"Durante la división, el huso está unido a un punto determinado de la membrana celular, que también determina el eje a lo largo del cual la célula se divide --agrega Reya--. Debido a que las proteínas no se distribuyen de manera uniforme en toda la célula, el eje de la división, a su vez, determina los tipos y las cantidades de proteínas que se distribuyen a cada célula hija. Por ejemplo, imagínese la diferencia entre el corte de la Tierra a lo largo de la línea ecuatorial en comparación con reducirla a la mitad longitudinalmente. En cada caso, los países que terminan en las dos mitades son diferentes".

Cuando los investigadores eliminaron Lis1 de células madre hematopoyéticas de ratón, la diferenciación se modificó radicalmente. La división asimétrica aumentó y aceleró la diferenciación, lo que resulta en un exceso de oferta de células especializadas y una reserva cada vez menor de células madre no diferenciadas, que finalmente resultó en un ratón sin sangre.

"Lo que encontramos fue que una gran parte de los defectos en la formación de la sangre se debió a un fallo de las células madre para expandirse", concreta Reya. "En lugar de producirse divisiones simétricas para generar dos hijas de células madre, predominantemente se sometieron a la división asimétrica para generar células más especializadas. Como resultado, los ratones fueron incapaces de generar suficientes células madre para mantener la producción de células sanguíneas", añade.



Luego, los científicos observaron cómo las células madre del cáncer en ratones se comportaban cuando la vía de señalización Lis1 fue bloqueada, al descubrir que también perdieron la capacidad de renovar y propagarse. "En este sentido, el efecto que tiene Lis1 sobre la autorrenovación leucémica es paralelo a su papel en la autorrenovación normal de células madre", señala Reya.

Esta investigadora subraya que los hallazgos arrojan nueva luz sobre los reguladores fundamentales del crecimiento de las células, tanto en el desarrollo normal como en el cáncer. "Nuestro trabajo demuestra que la eliminación de Lis1 inhibe potentemente el crecimiento del cáncer e identifica Lis1 y otros reguladores de la herencia de la proteína como una nueva clase de moléculas que podrían ser objeto en la terapia del cáncer", agrega.

Reya observó que queda por determinar si la inhibición de Lis1 en células de cáncer produciría consecuencias inaceptables en las células normales. "Un número de agentes de hemoterapia comúnmente utilizados se dirigen a la maquinaria que controla la división celular. Aunque estos agentes pueden ser tóxicos, sus efectos sobre las células cancerosas son mucho más potentes que sus efectos sobre las células normales, por lo que siguen siendo utilizados. Estos agentes podrían ser más específicos y menos tóxicos, lo que les daría un valor clínico significativo", concluye.

Una fábrica de tráqueas

Fuente: http://www.technologyreview.es/read_article.aspx?id=44622


Una tráquea cultivada en laboratorio rota en una incubadora, lista para ser trasplantada en un niño pequeño.



Desde 2008, ocho pacientes han tenido la oportunidad de vivir nuevamente gracias al reemplazo de sus dañadas tráqueas con versiones creadas por el hombre. Esta tecnología altamente experimental está pasando de los laboratorios de investigación a una instalación de fabricación, a medida que una empresa del área de Boston (EEUU) se prepara para fabricar los soportes para el cultivo de órganos sintéticos a gran escala.

Harvard Apparatus Regenerative Technology, o HART, está probando su sistema de tráquea sintética en Rusia, y tiene planes para hacer pruebas similares en la Unión Europea este año. La compañía está trabajando con la Administración Estadounidense del Medicamento para también realizar pruebas en EEUU.

Las tráqueas sintéticas se crean a partir del cultivo de las propias células madre del paciente en un soporte fabricado en laboratorio. En el futuro, esta técnica podría ser adaptada para crear otros órganos, como un reemplazo de esófago, de válvula de corazón, y de riñón.

Si se expande a más partes del cuerpo, la tecnología de órganos sintéticos podría ayudar a satisfacer una grave necesidad médica. Las listas de espera de trasplantes de órganos vitales como el corazón, los pulmones, el hígado y los riñones son preocupantemente largas. Cada día mueren muchos pacientes esperando órganos donados. Sólo en EEUU, 120.000 personas están en lista de espera para un órgano, según estimaciones del Departamento de Salud y Servicios Humanos del país. Y las listas de espera subestiman la verdadera necesidad, asegura el cirujano-científico del Hospital General de Massachusetts (EEUU) Joseph Vacanti, que también es un líder en la investigación de ingeniería de tejidos. "La única manera en que podemos satisfacer esa necesidad real es con la fabricación de órganos vivos", afirma Vacanti, que no está afiliado con HART.


Un soporte de tráquea sintética creado mediante el hilado de delgadísimas fibras de plástico en un tubo.



Investigadores de todo el mundo están encontrando nuevas maneras de crear tejidos para trasplantes. "Durante 25 años, el campo ha pasado de la ficción y la fantasía a la ciencia y la ingeniería", señala Vacanti. Existen muchos enfoques diferentes, desde la impresión precisa con chorro de tinta de tipos de células en una estructura organizada (ver "Células oculares impresas para tratar la ceguera") hasta permitir que las células se auto-organicen espontáneamente en proto-órganos (ver "Creado un hígado rudimentario partiendo de células madre" y "Cultivando ojos").

El enfoque actual de HART consiste en cultivar células madre de un paciente en soportes sintéticos. Las cuatro cirugías de tráquea artificial más recientes se han realizado con estos soportes de laboratorio a medida, afirma el director general de HART, David Green.

Cultivar las propias células de un paciente en un soporte proporciona un buen ambiente para las células madre de médula ósea, que después pueden convertirse en varios tipos de células, tanto en la incubadora como después de su implantación en el paciente.

HART crea estas estructuras haciendo girar fibras sobre una centésima de la anchura de un cabello humano en un tubo creado a medida para que se adapte a cada paciente. El resultado es un soporte personalizado "que crea una malla del tamaño adecuado para las células", afirma Green. "Se sienten como en casa".

Las células madre tomadas de la médula ósea del paciente son, después, "rociadas sobre la parte superior del soporte, como un pollo en un asador", asegura Green. Las células adheridas a esta estructura se cultivan en una incubadora giratoria especializada durante, aproximadamente, dos días antes de ser trasplantadas. Unos cinco días después del trasplante, aparecen nuevos tipos de células en el órgano, afirma, y entre ellas hay células importantes que recubren la superficie interior y ayudan a eliminar la mucosidad de los pulmones al toser. En última instancia, los vasos sanguíneos se desarrollan en el órgano sintético, concluye Green.

Células madre para evitar implantar prótesis

Fuente: http://www.lasprovincias.es/v/20140209/comunitat/operan-celulas-madre-para-20140209.html


Traumatólogos alicantinos han conseguido regenerar el cartílago en rodilla con una técnica que han diseñado, basada en células madre, y que permite que pacientes jóvenes y deportistas tengan la misma calidad de vida que antes de la lesión (sin incapacidades, inflamaciones y dolores), y en algunos casos en personas mayores evita la utilización de prótesis.


Después de cuatro años de estudio y desarrollo de este método pionero, la Unidad de Rodilla del Hospital General de Alicante -dirigida por el doctor Simón Campos- ha confirmado que este tratamiento permite la regeneración y ya hay casas americanas interesadas en importar el modelo debido a que este tipo de lesiones es muy frecuente entre la población.

La unidad ha tratado a más de un centenar de pacientes con las células madre más primitivas del organismo del interior del fémur. Antes probaron con las células madre de la cresta ilíaca, un hueso situado en la zona de la cadera, pero eran de poca cantidad y calidad. «Sabíamos que éste camino podía ser una solución mejor a lo que teníamos y ahora lo podemos confirmar con datos», que ya han sido publicados en revistas científicas nacionales e inglesas.

La técnica se dirige a dos perfiles: gente joven o de mediana edad, que sufren lesión del cartílago por traumatismos deportivos o, por ejemplo, accidentes laborales, entre otras causas; y para determinadas personas mayores se evita la prótesis que hasta ahora era su única solución.

En un 80%-90% de los jóvenes se ha logrado la regeneración completa del cartílago hialino (con el que se nace) y en los mayores con artrosis moderada se ha conseguido que personas cercanas a los 65 años recuperen su funcionalidad anterior y sin necesidad de una prótesis.

sábado, 1 de febrero de 2014

Informe de evaluación del potencial de la investigación con células madre

Fuente: http://www.madrimasd.org/informacionidi/noticias/noticia.asp?id=59345


En un informe realizado recientemente se informa de que el sector dedicado a la investigación con células madre crece a una velocidad que duplica la media científica general, un 7% frente a un 2,9%.


El estudio, en el que se contempló el crecimiento y el desarrollo del campo dedicado a las células madre en su conjunto, también trató sobre la situación científica de las células madre y embrionarias (ES) y las células madre pluripotentes inducidas (iPS). El informe corrió a cargo de un consorcio en el que participó el proyecto financiado con fondos europeos EUROSTEMCELL y se debatió hace poco en la Cumbre Mundial sobre células madre, World Stem Cell Summit celebrada en San Diego (Estados Unidos). En él se debaten resultados positivos relacionados con el progreso de la investigación sobre células madre.


Por ejemplo, las publicaciones destinadas a las células madre se citan un 50% más que la media mundial para el resto de materias relacionadas. Cerca de la mitad de los artículos sobre células madre emplean palabras clave relacionadas con el 'desarrollo de fármacos' o con la 'medicina regenerativa'. Como ejemplo del progreso continuo y del futuro clínico de este campo, se aprecia que el 47% de las publicaciones sobre células madre utilizaron palabras clave relacionadas con la medicina regenerativa, mientras que el 2% emplearon otras relacionadas con el desarrollo de fármacos. Singapur, Italia, Estados Unidos, Japón e Israel fueron los países con mayor actividad en el campo de la investigación con células madre y Estados Unidos y China la mayor producción.


"El objetivo de este informe fue impulsar los avances en el debate científico y político sobre las células madre mediante un compendio exhaustivo de las revisiones analíticas al respecto y de opiniones de expertos", explicó Nick Fowler, Director Ejecutivo de Instituciones Académicas y Gubernamentales para Elsevier, uno de los autores del informe. "Estamos orgullosos de la colaboración entablada con EUROSTEMCELL, la Universidad de Kioto, iCeMS y los expertos que han suministrado aportaciones de gran valor".


Las células madre sirven de fuente de células especializadas gastadas o dañadas. Son capaces de producir ininterrumpidamente copias de sí mismas y de otras células más especializadas, una capacidad que las convierte en un tipo de células singulares. A diferencia de los glóbulos rojos, que transportan oxígeno a través del torrente sanguíneo, o de una célula muscular que colabora con otras células para generar movimientos, una célula madre no posee propiedades fisiológicas especializadas. Esto hace que posean una importancia científica enorme, sobre todo en el ámbito médico. Algunas de las enfermedades más graves, como el cáncer o los defectos congénitos, se deben a procesos celulares anómalos de división y diferenciación. Un mayor conocimiento de los controles genéticos y moleculares que tienen lugar en estos procesos podría generar información sobre cómo surgen estas enfermedades y dar lugar a propuestas de terapias.


Este es un objetivo importante para la investigación con células madre y en concreto para EUROSTEMCELL, proyecto iniciado en marzo de 2010. Financiado con 830.238 euros a través del Séptimo Programa Marco (7PM) de la Comisión Europea, en él participan más laboratorios de investigación sobre células madre y medicina regenerativa a fin de coordinar labores de comunicar a la opinión pública información sobre la ciencia realizada con estas células.


"Este informe presenta una vista general de la situación de la investigación con células madre en todo el mundo generada mediante técnicas bibliométricas avanzadas que permiten identificar tendencias nacionales e internacionales, es decir, dónde existe una mayor intensidad científica al respecto, dónde se está desarrollando a mayor velocidad, si los resultados de las iniciativas de financiación individuales están generando publicaciones de gran impacto, etc.", aclaró la profesora Clare Blackburn, perteneciente al Centro MRC de Medicina Regenerativa de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido) y coordinadora del proyecto EUROSTEMCELL.


"Ha resultado extremadamente interesante ejecutar el análisis de estos datos pues ha aportado una gran cantidad de información que mueve a reflexionar. Confiamos en que sus destinatarios obtengan un conocimiento más completo del estado de este ámbito para así alimentar futuros debates políticos al respecto".



ANTONIA ARÁNEGA, INVESTIGADORA EN CÉLULAS MADRE

Fuente: http://www.granadaenlared.com/2014/01/21/antonia-aranega-la-firme-apuesta-por-la-investigacion-de-las-celulas-madre-embrionarias/


La granadina Antonia Aránega decidió dejar a un lado su especialización en Pediatría y dedicarse de lleno a la investigación biomédica. Cuando cursaba sus estudios de medicina, era una de las pocas mujeres que lo hacía. Aránega es catedrática de Anatomía y Embriología Humana de la Universidad de Granada. Las diferentes líneas de investigación en las que está implicada se desarrollan en el Instituto de Biopatología y Medicina Regenerativa, en el Parque Tecnológico de la Salud de Granada. El cáncer de páncreas y los tumores del sistema nervioso son algunas de las enfermedades sobre las que trabajan en su grupo de investigación, así como en la aplicación de las nuevas tecnologías a la investigación.